El proceso del parto puede ser uno de los eventos más traumáticos de nuestra vida y la consecuente inflamación al sistema nervioso puede ser la causa de muchas quejas del recién nacido. Cólicos, llanto sin explicación, poco apetito, problemas de respiración y reacciones alérgicas pueden frecuentemente ser relacionadas con disfunciones del sistema nervioso provocadas por una columna vertebral con mal funcionamiento.
Apoyar la cabeza, gatear y los primeros pasos del bebé deberían ser seguidos por revisiones quiroprácticas. Si se descuidan, los golpes y caídas durante este periodo de rápido crecimiento podrían conducir a serias deformaciones más tarde en la vida. Esto puede establecer el escenario para una escoliosis, "dolores frecuentes" y un sistema inmunológico débil.
Los ajustes quiroprácticos son modificados para adecuarse al tamaño, peso y problema espinal específico del niño. Los padres frecuentemente informan de que sus hijos parecen más saludables que otros niños de su edad.
Muchos problemas de columna vertebral en edad adulta comienzan en la infancia y el cuidado de la columna vertebral apropiado es extremadamente importante para mejorar la salud.
Algunos padecimientos que con la Quiropráctica han tenido buenos resultados: